La preparación para la mini cirugía de bypass gástrico es similar a la de cualquier otro tipo de cirugía bariátrica, lo que incluye cambios dietéticos y de estilo de vida antes y después de la intervención. El paciente debe seguir una dieta hipocalórica estricta para reducir peso antes de la operación, así como tomar suplementos recomendados por el médico. Además, el paciente debe dejar de fumar y de beber alcohol.

La recuperación tras una mini cirugía de bypass gástrico es similar a la de cualquier otro procedimiento bariátrico. Generalmente, el paciente puede irse a casa a los dos días de la operación y debe tomarse un mes de baja laboral. Durante este tiempo es importante descansar, llevar una buena alimentación y seguir cuidadosamente todas las recomendaciones médicas. También es necesario seguir un estilo de vida sano y una dieta adecuada para favorecer la pérdida de peso y prevenir complicaciones. La actividad física también es esencial para fortalecer el cuerpo y mejorar los parámetros metabólicos. En general, la mini cirugía de bypass gástrico es un procedimiento seguro y eficaz para los pacientes afectados por obesidad que no pueden o no quieren someterse a una cirugía bariátrica tradicional. Con la preparación y los cuidados adecuados, esta cirugía puede ser clave para mejorar la calidad de vida y la salud.

Los candidatos más adecuados para la mini cirugía de bypass gástrico son los que tienen un índice de masa corporal de entre 35 y 45 y padecen problemas de salud relacionados con la obesidad, como diabetes o hipertensión arterial. Este tipo de cirugía también se recomienda en personas que presentan superobesidad, ya que el pequeño estómago que se crea limitará la cantidad de comida que pueden ingerir.